El Presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha afirmado hoy que la transición energética representa una “enorme oportunidad” para la compañía, que está inmersa en una transformación basada en sus capacidades humanas, tecnológicas e industriales para asegurar un futuro más rentable y sostenible. Durante la Junta General de Accionistas, ha repasado las claves de la transición energética, principalmente en Europa, y el camino hacia las cero emisiones netas en 2050.
Antonio Brufau ha destacado los planes de transformación de los complejos industriales para producir combustibles renovables, junto a los convencionales, el negocio de generación renovable −con un objetivo de capacidad instalada de 6 GW en 2025 y 20 GW en 2030−, la eficiencia energética y el despliegue de proyectos de hidrógeno renovable. “Haremos de Repsol una empresa cada vez mejor, adaptada a los requerimientos de la sociedad, más rentable, a la vanguardia en innovación y ambiciosa en sus objetivos”, ha señalado.
El Presidente de Repsol ha añadido que, “como sociedad, nuestro reto es transformar nuestra forma de crecer, nuestra economía y nuestra industria para alcanzar la neutralidad climática en 2050, pero sin perder el liderazgo tecnológico-industrial”. Según Brufau, Europa está centrada en la sostenibilidad de la transición energética: “La descarbonización exige bases tecnológicas e industriales sólidas, exentas de ideologías y dogmatismos, y un marco regulatorio estable que incentive las inversiones para no perder competitividad”.
En su intervención, ha enumerado las “luces y sombras” de la reacción europea ante la guerra en Ucrania. En el lado positivo, ha destacado la cohesión y la solidaridad de Europa y la política de sanciones a Rusia. Por otro lado, ha afirmado que la estrategia regulatoria de Europa carece de planificación, lo que compromete la seguridad de suministro y la asequibilidad de la energía.
En este punto, ha considerado que la regulación europea fomenta la reducción de emisiones a costa de perder tejido industrial y competitividad, ya que una parte de las emisiones que se reducen en la Unión Europea se exportan a otros países que asumen esta producción industrial. “Es imprescindible que Europa cambie la manera de construir las cadenas de valor y suministro para no depender en la transición energética aún más de China o Rusia”, ha subrayado. Además, ha recordado que la Unión Europea importa el 55% de la energía que consume, mientras Estados Unidos es un exportador neto.
Acuerdos de la Junta General de Accionistas
Entre otras propuestas, la Junta ha aprobado un dividendo complementario de 0,35 euros brutos por acción −con cargo a los beneficios del ejercicio 2022− que se abonará el próximo 6 de julio, y que se sumará a la retribución pagada en enero de este año. Con ello, el dividendo en efectivo aumentará un 11%, hasta los 0,70 euros brutos por acción, frente al ejercicio anterior. Los accionistas también han dado el visto bueno al reparto de otros 0,375 euros brutos por acción con cargo a reservas libres, asimilable al tradicional pago a cuenta del ejercicio 2023, cuya distribución está prevista a lo largo del mes de enero de 2024, en la fecha que concrete el Consejo de Administración.
La Junta General de Accionistas también ha aprobado una reducción del capital social, mediante amortización de 50 millones de acciones propias y la delegación en el Consejo de Administración o, por sustitución, en la Comisión Delegada o el Consejero Delegado, de la facultad de ejecutar reducciones de capital adicionales hasta un máximo de 132.739.605 acciones propias, equivalente al 10% del capital social, para tener una mayor flexibilidad a la hora de llevar a cabo amortizaciones.
Asimismo, la Junta General de Accionistas ha votado a favor de la reelección como consejeros de Antonio Brufau, Josu Jon Imaz, Aránzazu Estefanía, María Teresa García-Milá, Henri Philippe Reichstul y John Robinson West, y de la ratificación del nombramiento por cooptación y reelección como consejero de Manuel Manrique. Además, los accionistas han apoyado el nombramiento como consejera de María del Pino Velázquez.