Por Carlos Dorado Italcambio

Quien hace apenas unos años vaticinaba que el email marketing iba a estar fuera de las estrategias de las empresas a estas alturas, se equivocó estrepitosamente. El email marketing no es que no esté fuera, es que forma parte de cada una de las planificaciones de marketing y comunicación que se plantean desde las empresas.

Para empezar, es necesario darle una vuelta a, precisamente, saber qué es. Se trata de llevar un mensaje, promoción o información de relevancia a los emails que, por interés, han ido permitiendo que se les envíe información comercial de la compañía.

De hecho, en ratios de conversión, es una de las herramientas de marketing que mejor están funcionando como la ofrecida por Mailrelay porque, más allá de la personalización que permiten, que es elevada gracias también a herramientas de automatización, pone a mano del usuario toda la información sin interrumpir su navegación habitual y hace a las empresas poder enviar 80.000 emails al mes y subir hasta 20.000 contactos de forma gratuita.

Basta echar un vistazo a un email comercial ejemplo para darse cuenta de las posibilidades que hay.

¿Cuáles son las claves para hacer un buen email marketing?

  1. En primer lugar, es necesario dejar claro que, quien se suscriba a la lista de envíos, recibirá en el correo la información de relevancia que la empresa distribuya por esta vía. Es necesario – aparte de ser ya un requisito legal – facilitar la posibilidad de que, al igual que se han dado de alta de forma sencilla, puedan proceder a darse de baja también de forma sencilla. De ahí que haya que tener esa llamada de atención en cada comunicación. Ese primer mail confirmando la suscripción debe llevar también un pequeño resumen de lo que puede esperar en los correos.
  2. Originalidad. Es básico que cualquier comunicación que llegue hasta el mail de una persona que ha confiado en seguir en contacto con la marca merezca la pena. De ahí que haya que tirar de imaginación, originalidad y creatividad para que sea una sorpresa visual.
  3. ¿Qué pasa con el texto? El copywriting se ha convertido en una de las disciplinas mejor valoradas por las empresas ya que de esos textos depende la fidelidad, interés y conversión. Dar con un tono, un registro y un estilo que sirva para ser el altavoz corporativo es imprescindible y vital para que la estrategia funcione.
  4. Las imágenes. Al texto es necesario acompañarlo con algo visual. Colores, imágenes que tengan que ver con el contenido van a ser claves porque no hay que olvidar que vivimos en una sociedad que ya es eminentemente visual. Una comunicación sin ese aliciente, ya sea por una fotografía o incluso un vídeo o gif, será una pérdida de oportunidad.
  5. Ser claro. Es clave lanzar un mensaje contundente y claro. Para eso está el copy, pero hay que evitar sobre todo dar más vueltas de las necesarias. Si es una promoción, una novedad o una rebaja, que se vea, se entienda y se visualice y asuma en menos de 5 segundos. Es el tiempo que va a tener el mail para conseguir su objetivo y no ser desechado, así que hay que aprovecharlo al máximo siendo directo.

Todo esto garantizará, al menos, parte del éxito y, por extensión, la reconversión en ventas o contrataciones. Es el momento de apostar por ello.

Por Carlos Dorado Italcambio