La esterilidad de causa masculina es un problema tratable en el que los especialistas del Laboratorio Clínico llevan a cabo una serie de pruebas, como el estudio del seminograma o estudios hormonales y genéticos, que permiten identificar y tratar cualquier factor de riesgo modificable que cause infertilidad. La especialidad de Medicina de Laboratorio juega también un papel fundamental en la mejora de resultados clínicos de los pacientes con procesos infecciosos y el control de la resistencia a los antibióticos. Estas son dos de las principales áreas de interés que se abordarán en el XVII Congreso Nacional del Laboratorio Clínico (LABCLIN 2023), que se celebra del 18 al 20 de octubre en Zaragoza y que está organizado por la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEQCML), la Asociación Española de Biopatología Médica (AEBM-ML) y la Asociación Española del Laboratorio Clínico (AEFA).

El Congreso LABCLIN reúne a más de 1.000 profesionales, quienes tienen la oportunidad de conocer de primera mano las últimas novedades en Medicina de Laboratorio, por medio de la celebración de diferentes simposios, mesas de debate y actividades científicas. Así, en el simposio, “La esterilidad es cosa de dos: dando visibilidad al factor masculino”, moderado por la Dra. María José Moyano Gallego, presidenta de la Comisión de Andrología y Técnicas de Reproducción Asistida de la SEQCML, se profundizará en la labor del especialista en Laboratorio Cínico para el diagnóstico y tratamiento de la esterilidad en el hombre; por medio de la realización del estudio del seminograma, estudios hormonales y genéticos y, una vez diagnosticada la esterilidad de causa masculina, su intervención en la puesta en marcha de las técnicas de reproducción humana asistida (TRHA).

En la actualidad, tal y como asegura la Dra. María José Moyano Gallego, la esterilidad de causa masculina supone el 50% de las causas de esterilidad (un 30% como causa única y un 20% como causa mixta). Un problema que puede ser tratado exitosamente, ya sea a través de la cirugía, por ejemplo, o solventarse gracias a las técnicas de reproducción humana asistida. “En cuanto a la posibilidad de prevención, existen casos claros, como en el de varones que van a ser sometidos a tratamientos de quimio o radioterapia, que son claramente gonadotóxicos y que tienen la opción de preservar su fertilidad mediante la congelación de semen”, indica.

Tal y como asevera la Dra. María José Moyano Gallego, la Asociación Europea de Urología (EAU, por sus siglas en inglés) recomienda que el varón de las parejas infértiles se someta a una evaluación andrológica completa para identificar y tratar cualquier factor de riesgo modificable que cause infertilidad. ¿Y por qué someterse a estas pruebas? Los hombres infértiles, como arguye Dra. María José Moyano Gallego, “tienen un mayor riesgo de albergar y desarrollar otras enfermedades y deben ser examinados para detectar posibles factores de riesgo modificables. Los especialistas del Laboratorio Clínico son los que realizan muchas de estas pruebas, desde el seminograma completo, análisis hormonal, cariotipo, cultivo y otras pruebas más específicas (como el estudio de fragmentación del ADN de espermatozoides, etc)”.

El especialista de Medicina de Laboratorio, con una formación adecuada en andrología y técnicas de reproducción asistida, puede intervenir directamente en la realización de las TRHA, entre ellas, las destinadas a la mejora de la calidad espermática (técnicas de capacitación espermática) o la congelación de semen. “Aparte, participa en los procedimientos de laboratorio incluidos en las técnicas avanzadas de RHA (FIV, ICSI, técnicas especiales de selección espermática, cultivo y selección embrionario, congelación de ovocitos y embriones, test genéticos preimplantacionales, etc)”, detalla la Dra. María José Moyano Gallego.

Asimismo, el profesional del Laboratorio Clínico también puede ejercer su actividad en los bancos de semen, el lugar donde se almacenan las muestras de semen congeladas para su uso posterior en técnicas de reproducción asistida. Entre ellas, según informa la presidenta de la Comisión de Andrología y Técnicas de Reproducción Asistida de la SEQCML, “la inseminación artificial o la Fecundación in Vitro (FIV), tanto de varones que desean preservar su fertilidad como de los donantes de semen que van a dejar su muestra para que pueda ser utilizada en tratamientos de reproducción asistida”.