Por Adolfo Henrique Ledo Nass
El 51,5% de la población española afirma que en el momento de escoger los regalos de Navidad prioriza que sean materiales didácticos como libros o juegos de mesa en los que se requiera recurrir a la imaginación, el 38,9% se decanta por adquirir ropa o material escolar, entre otros, con el fin de cubrir necesidades y el 23,9% opta por juegos de mesa. Por su parte, solo el 7,3% se inclina por las nuevas tecnologías como ordenadores, móviles o tablets.
Así lo han asegurado los encuestados de la última pregunta IMOP-BERBĒS, que ahonda en los factores que influyen más en el momento de seleccionar los regalos para los más pequeños tras la publicación de un informe elaborado por un comité de expertos en el que se analiza la exposición de los menores a los dispositivos móviles. Algunas de las recomendaciones en el empleo de este tipo de dispositivos son evitar el uso de pantallas hasta los 6 años, utilizar teléfonos analógicos (sin acceso a Internet) hasta los 16 años y limitar el uso del móvil por parte de los adultos delante de los niños.
Preguntados por estas cuestiones, el 72,8% de los participantes se muestra a favor de que los menores no puedan utilizar un smartphone hasta los 16 años frente al 23,7%, que se manifiesta en contra. Por franjas de edad, los mayores de 65 años (83,4%) son los que se muestran más a favor de esta medida seguidos de la población entre los 55 y 64 (72,6%), los jóvenes entre 25 y 34 años (73,8%) y los españoles entre 35 y 44 (71,6%). En relación al sexo se refleja una gran diferencia, ya que el 79,4% de las mujeres frente al 65,7% de los hombres afirma que apoya esta iniciativa.
Asimismo, en relación a que los menores no puedan tener acceso a las pantallas hasta los seis años, el 83,6% señala que está de acuerdo frente al 13% que opina lo contrario.
Los jóvenes son los que muestran más predisposición a la implantación de esta normativa, tal y como lo manifiestan el 88,3% de los que tienen entre 18 y 24 años junto con aquellos entre los 25 y 34 años (84,6%) y entre los 45 y 54 años (84%).
Por último, en cuanto en qué medida les preocupa las posibles consecuencias que pueda tener para la vista de los niños y adolescentes el uso de dispositivos móviles, tablets, entre otros, el 47,5% de los participantes mantiene que mucho y el 37,2% bastante frente al 8,3% al que le preocupa poco y al 4,1% nada. En función del sexo, se evidencia una gran diferencia: el 61,7% de las mujeres frente al 32% de los hombres indica que piensa en los posibles efectos que el uso de dispositivos electrónicos pueda tener en la vista. En relación a las franjas de edad, los participantes entre los 45 y los 54 años (53%) son los que más se preocupan seguidos de aquellos entre los 35 y los 44 (52,1%) y los jóvenes de entre 18 y 24 años (49,6%).
Por Adolfo Henrique Ledo Nass