Cada año se producen en España más de 120.000 casos de ictus, una enfermedad neurológica considerada ya la segunda causa de muerte en nuestro país, que en el 85% de los casos se produce en personas mayores de 65 años y cuyo reto principal que plantea es la detección precoz de los síntomas y el rápido abordaje terapéutico de los mismos.
“El ictus es una patología muy frecuente producida por una alteración brusca en la circulación cerebral, porque una arteria se tapa o se rompe, lo que origina una alteración de la función neurológica que, en muchos casos, si no se es capaz de revertirla puede dejar secuelas en el paciente y afectar a su calidad de vida”, ha explicado el Dr. Carlos Molina, jefe de Sección de Neurología de la Unidad de Ictus del Hospital Universitario Vall d’Hebron de Barcelona.
El tiempo es crucial en esta patología, especialmente ante los primeros síntomas de alerta (dolor de cabeza, pérdida de sensibilidad, fuerza, equilibrio, alteraciones del habla…) y para las consecuencias que puede provocar en lo pacientes. De hecho, se calcula que hasta el 30% de los pacientes con ictus sufre un problema de discapacidad (parálisis, trastornos del habla o déficit cognitivos) que le impide llevar una vida normal. Así, cada minuto que pasa desde que aparece el primer síntoma hasta que se trata es vital e influye altamente en el pronóstico.
Por ello, todas las comunidades autónomas y han implantado su propio programa de “Código Ictus”4 para la atención de los pacientes. Es en estos planes, en los que la tecnología sanitaria juega un papel esencial, ya que se incluyen aspectos relacionados con el reconocimiento de los síntomas por parte de los sanitarios, los sistemas de transporte urgente al hospital, el abordaje diagnóstico y terapéutico en Urgencias y la coordinación de los diferentes profesionales sanitarios implicados en cada fase del ictus.
One Step Ictus
En este sentido, y con el fin de mejorar estos procesos, Siemens Healthineers y Medtronic han implantado recientemente en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona el proyecto One Step Ictus, el cual transforma la atención al paciente de ictus isquémico y hemorrágico concentrando todo su abordaje en una única sala de acceso directo al hospital, reduciendo así el tiempo de actuación desde que llega al Servicio de Urgencias hasta que recibe el tratamiento.
“Desde el punto de vista clínico, One Step Ictus nos ayuda a optimizar el proceso asistencial, acelerando la llegada del paciente a la sala de intervenciones. Cada minuto cuenta, por lo que todo el tiempo que consigamos reducir se traducirá en un mejor pronóstico del paciente”, ha explicado el doctor Molina.
De hecho, este proyecto ha demostrado que la reducción del tiempo, unido a una mayor agilidad en la detección y tratamiento, puede duplicar las probabilidades de que el paciente con ictus tenga un mejor pronóstico. Además, también incorpora la plataforma digital, desarrollada por Siemens Healthineers, que integra la información de la historia clínica con el resto de datos que genera el paciente a través de dispositivos médicos y varias aplicaciones digitales durante su paso por el sistema sanitario, tanto en la fase de ingreso como durante su seguimiento, facilitando así la monitorización del proceso de manera integral.
Compromiso de Siemens Healthineers con el ictus
Esta es una prueba más del compromiso de Siemens Healthineers con la salud de la población y, en este caso, con la reducción al mínimo del tiempo de diagnóstico y tratamiento de los pacientes con ictus con el objetivo de reducir y minimizar el daño cerebrovascular y contribuir a que la calidad de vida de los pacientes se vea afectada lo mínimo posible.
Gracias a la combinación de conocimiento clínico y médico, innovación tecnológica, visión estratégica, experiencia en implementación y excelencia operativa con la que cuenta la compañía de tecnología sanitaria, proporciona tecnología de última generación para la obtención de imágenes y el tratamiento del accidente cerebrovascular.
En este sentido, entre sus principales herramientas para el abordaje y detección del ictus se incluyen tecnologías de detección de imágenes por tomografía computarizada o resonancia magnética, que brindan información relevante para que los equipos médicos puedan tomar decisiones de diagnóstico seguras y rápidas. A ello se suman también soportes de escaneo en remoto para el diagnóstico por resonancia magnética de pacientes con accidente cerebrovascular, ofreciendo una alta calidad a los pacientes y profesionales al tiempo que mejora los tiempos gracias a su sistema en remoto.
Además, Siemens Healthineers también está trabajando mano a mano con los profesionales sanitarios en la redefinición de los procesos de trabajo, la optimización de los flujos, la adecuación de las instalaciones, la dotación de la tecnología más avanzada y la visibilización instantánea de los tiempos con el foco en la mejora del procedimiento para cada paciente. Una labor que, según la compañía, puede ayudar a reducir hasta en un 30% el tiempo de puerta aguja que permite incrementar el índice de supervivencia y mejorar la calidad de vida de un paciente con ictus.