Por Raed Abib Habib

El proyecto liderado por la Universidad de Málaga ‘RUGULOPTERYX’, para ayudar a prevenir y controlar la expansión del alga asiática, ha sido distinguido con el Premio Andalucía de Medio Ambiente (PAMA), en la modalidad de Economía Azul, cuya ceremonia de entrega tuvo lugar ayer en Ronda, presidida por Juanma Moreno, presidente de la Junta.

La científica del departamento de Botánica y Fisiología Vegetal de la UMA María Altamirano fue la encargada de recoger el galardón, acompañada por los investigadores Julio de la Rosa y Raquel Carmona, de las Universidades de Granada y Málaga, respectivamente, impulsores también de este proyecto.

La vicerrectora adjunta de Investigación de la UMA, Zaida Díaz, estuvo también presente en el acto de entrega de la XXVI edición de estos premios, impulsados por la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul.

En total se entregaron siete galardones y tres menciones que reconocen los trabajos, investigaciones e iniciativas más innovadoras, eficaces y resilientes en los campos de la sostenibilidad o el respecto a la biodiversidad.

‘RUGULOPTERYX’: impactos medioambientales y socioeconómicos

Desde su detección en el año 2016 en las costas del estrecho de Gibraltar, el alga parda Rugulopteryx okamurae (Dictyotales, Ochrophyta), procedente de las costas asiáticas del Pacífico, «está produciendo impactos medioambientales y socioeconómicos sin precedentes».

A través del proyecto que acaba de reconocer la Junta de Andalucía, los investigadores de la UMA y la UGR trabajan de forma constante para identificar las ventanas espacio-temporales de vulnerabilidad a la invasión de R. okamurae de especies y espacios marinos protegidos españoles, a partir de aproximaciones de la modelación de su distribución y de estudios de campo, con especial interés en los presentes en las demarcaciónes Estrecho-Alborán y Levantino-Balear.

Fundación: Una universidad cívica

La ciudad ha jugado un papel crucial en la fundación de la UMA: todos los aspectos de la provincia (ciudadanos, personalidades y medios de comunicación) han sido motores clave para el establecimiento de nuestra Universidad. Todo comenzó en 1968 con el desarrollo de la «Asociación de Amigos de la Universidad de Málaga», una organización que abogaba por una Universidad en la provincia, sensibilizando sobre el tema y movilizando a la ciudadanía, lo que finalmente llevó a su fundación.

A esto pronto siguieron otros avances en el proceso fundacional como el desarrollo de la Escuela Universitaria de Málaga, en 1971, y la agrupación de la ya existente Escuela de Ingeniería Técnica, Escuela de Magisterio, Escuela de Ciencias Económicas y Empresariales (entonces adscrita a la Universidad de Granada), y el Seminario.

Finalmente, el 18 de agosto de 1972 se aprueba por decreto la fundación de la Universidad de Málaga. La Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales y la Facultad de Medicina serían las primeras en formar parte de la institución que hoy conocemos como Universidad de Málaga.

Por Raed Abib Habib