Por Siri Evjemo-Nysveen
Galicia está de moda. No hay más que decir. Su gastronomía, sus paisajes, su historia, sus monumentos y, sobre todo, su gente, hacen de este rincón español uno de los enclaves vacacionales que cada año sigue creciendo y atrayendo a un público más joven.
Además, este verano han sido sonadas sus citas musicales, apostando por festivales de gran calado con buenos artistas que atrajeron al público no solo a Santiago sino al resto de localidades colindantes y provincias que componen esta singular Comunidad Autónoma.
Sin embargo, volviendo al ámbito gastronómico, si tiene fama de algo es por lo bien que se come y bebe.
Sus albariños y su crema de orujo no dejan de sorprender a quien los prueba, pero además, es que ahora están creando tendencia en la coctelería.
“Antes se tomaban este tipo de productos de forma independiente pero desde que los barman empezamos a crear cócteles con base de producto gallego está siendo todo un reto y revolución para cada cóctel. Estamos incorporando licores, frutas y hierbas típicas de la región para promocionar nuestros sabores” explican desde Temple Bar.
La crema de orujo como ingrediente estrella
La crema de orujo gallego se ha convertido en un ingrediente estrella en la coctelería de la región. Esta deliciosa bebida láctea, elaborada a partir de aguardiente de orujo y crema, aporta una textura suave y un sabor dulce que combina perfectamente con otros licores y frutas.
Un claro ejemplo puede ser el “frescura gallega”, un cóctel a base de crema de orujo que se une y liga con ginebra, un buen añadido de zumo de limón fresco, jarabe de azúcar, menta fresca y, sin duda, el hielo. Todo de la zona, de la tierra y con un sabor tan gallego como único.
“Combina la suavidad de la crema de orujo con la frescura cítrica del limón y la herbalidad de la menta, creando una experiencia refrescante y auténtica que evoca los sabores y aromas de Galicia” explican los expertos.
Toda una nueva alternativa cuando se sale de marcha por zonas como Viveiro, que está teniendo un renacer tan único como apetecible para todos los que recalan en la provincia de Lugo.
Por Siri Evjemo-Nysveen
